Este plato de origen escocés es uno de los más apreciados por los turistas a escala internacional, quizá por su intenso sabor y el gran número de especias que incluye. El haggis es un asado de cordero y oveja mezclado con cebolla picada, especias variadas y harina de avena. El resultado es una especie de embutido muy similar a la morcilla típica en España.